Barcelona es asombrosa, te avisamos. Una verdadera ciudad de contrastes, es efímera y constante, mediterránea y cosmopolita, ruidosa y llena de espacios en donde quedarse a solas solo con nuestros pensamientos. Un lugar donde mirar es dar rienda suelta a la metáfora, donde tu capacidad para la observación podrá compararse a la de los y las más famosas flanêurs. Cualquiera que sea el motivo de tu viaje, recorrerla sin un mapa en la mano, a ver dónde te llevan tus pasos es altamente recomendable, igual que hacía Vivian Maier cámara en mano por las calles de Nueva York. Perderse en Barcelona solo es solo dar el primer paso.